Gracias a nuestros orígenes como ganaderos y proveedores de vacuno, comprendemos la importancia que los productos tienen en el proceso culinario.
Partiendo de esta premisa, concentramos nuestros esfuerzos en buscar los productos de la más alta calidad en cada estación, para ofrecerles una cocina honesta y sincera, sin pretensiones vacías.
En definitiva una cocina para saciar el hambre y alimentar el espíritu.
Esta ha sido nuestra intención desde que abrimos el restaurante en 2009.
Nuestro comedor dispone de espacio para 70-80 comensales junto con una zona privada con espacio para 18 personas.
El Restaurante esta comunicado directamente con la terraza y jardín con acceso desde nuestro parking privado.